Sitges2019: de tierra rojiza y denso espacio sideral. De héroes y heroínas. De futuros (demasiado) cercanos.
“I can’t exist by myself because I’m afraid of myself, because I’m the maker of my own evil.”
La posesión (Possession, Andrzej Zulawski, 1981)
Estamos ya en Julio y Sitges acaba de anunciar el premio Honorífico a un Sam Neill que ha seleccionado personalmente la proyección de La posesión durante el festival. Y de aquella vamos a quedarnos con la frase de apertura seleccionada para desarrollar el recorrido por los avances presentados, y que ya han hecho estallar de la emoción a más de un fan….
La posesión
Durante el #SitgesCampus2019 el propio Ángel Sala, director del festival, ofreció toda una masterclass sobre el contexto sociocultural de la película leitmotiv de este Sitges2019, Mad Max. En ella comentó la evolución cinematográfica del antihéroe como personaje principal, como reflejo de un ciudadano que, harto de todo, prefería proyectar su malestar en una figura que lucha por sus propios ideales para restablecer el orden. Max, antihéroe, es el creador de su propio demonio (recordemos la introducción de Mad Max: Fury Road – Íd., George Miller, 2015), y es bien cierto que una posible lectura del personaje nos puede llevar a pensar que es el verdadero perturbador de una sociedad que, pese a todo, ha reconstruido sus cimientos con el objetivo más noble de la raza humana: sobrevivir. La fuerza bruta es la que moviliza a los indecisos; los dictadores son los que consiguen, con su malvado ahínco, hacer resurgir a poblaciones enteras…. Afirmación más que discutible, sí. Pero es bien cierto que cuando nos imaginamos nuestro futuro tendemos a ser pesimistas y erigir a alguien, depositando en él nuestra confianza (por miedo, o por intereses sociales) como nuestro propio Salvador. Grandes corporaciones o líderes enloquecidos… al final, “gracias a ellos”, el mundo persiste. Pero:
¿Por qué esa manía de proyectar un futuro gris, desolador, y controlador? El Dr. Latorre imagina para nosotros un futuro mucho más esperanzador, en el que estas grandes Empresas velarán por nuestro bienestar… pero este es otro tema.
Quizá un ejemplo más, digamos, noble, que también será motivo de homenaje en Sitges2019, es el de la Ripley de Alien, el octavo pasajero (Alien, Ridley Scott, 1979). Una trabajadora de una gran corporación (cómo no) que será la sorpresa del film (y todas sus secuelas) al transformarse en la gran salvadora de la posible invasión alienígena. Sobre la construcción de este personaje, así como de toda la pre-producción de la obra maestra de Scott (con permiso de Blade Runner – Íd., 1982-, … en esta página somos mucho más defensores de la distopía robótica que de la alienígena, la verdad)), la organización ya a dado a conocer uno de los platos fuertes del homenaje al film: el documental Memory – The Origins of Alien (Íd., Alexandre O. Philippe, 2019).
Memory – The Origins of Alien
Continuando con las distopías, se han presentado cuatro títulos dignos de seguimiento:
Con Vivarium (Íd., 2019), segundo largometraje de Lorcan Finnegan y que despertó mucha curiosida en la pasada edición de Cannes, nos adentraremos en la vida de una pareja de clase media atrapada en un vecindario en el que todas las casas son iguales y que se antoja toda una propuesta acerca de la deshumanización del individuo como tal.
Vivarium
De thriller a aparente comedia, pero manteniéndonos en zonas residenciales de la periferia urbana, nos vamos a Greener Grass (Íd., Jocelyn DeBoer, Dawn Luebbe, 2019), que describe un mundo, tildado por The Hollywood Reporter, como “al filo del universo alternativo de Langosta (The Lobster, Yorgos Lanthimos, 2015)”, y que parece, como la anterior, cuestionarse nuestras absurdas prioridades en un mundo que estamos a punto de destruir desde nuestra más absoluta inconsciencia.
Greener Grass
Seguimos con El hoyo (Galder Gaztelu-Urrutia, 2019), aún en post-producción y de la que poco se sabe aparte de lo que se explica desde Sitges2019: “sitúa al espectador en un entorno distópico donde las personas se encuentran divididas en diferentes niveles”. A bote pronto suena a High-Rise (Íd., Ben Wheatley, 2015) o Snowpiercer:Rompenieves (Snowpiercer, Joon-ho Bong, 2013)…. veremos hacía dónde termina llevándonos.
Para acabar, y anunciada dentro de una de las secciones que más seguimos en la web, Noves Visions, se presentará Jessica Forever (Íd., Caroline Poggi, Jonathan Vinel, 2018), que presenta un mundo en el que los inadaptados sociales tienen la supremacía (recordemos con qué tipo de héroes comenzábamos este texto) en el que una mujer luchará por la paz.
Jessica Forever
Aparte de distopías (que también tienden al género), el cine de terror, por lo poco que se ha avanzado hasta ahora, va a tener una marcada presencia en la edición, con el regreso de Rob Zombie y la familia Firefly en su nueva 3 From Hell (2019) destacada por encima de todas. Curiosidad por Come to Daddy (Íd., Ant Timpson, 2019), que se presenta como una estrepitosa y delirante mezcla de géneros en la que una reunión familiar padre-hijo acabará lejos de cómo lo imaginaba el joven, y por The Lodgde (Íd., 2019), el nuevo film de Severin Fiala y Veronika Franz que hace unos años convencieron en el festival (no en Venecia, pase en el que recuerdo abandonos en masa por parte de la crítica especializada) con Goodnight Mommy (Ich seh, ich seh, 2014), otro film de terror psicológico.
The Lodge
De los avances de la sección de animación, como no podría ser de otra manera tras su paso por Annecy y los buenos comentarios que de allá llegan, muchas ganas de Los niños del mar (Kaijû no kodomo, Ayumu Watanabe, 2019), film en el que drama social y esperanza marina se combinan para resolver un gran misterio.
Los niños del mar
Pero si aquí somos fans de un tipo de films concretos son los extraños, los más inclasificables que permiten varias lecturas a las propuestas de sus autores. Y si hay un director por excelencia que nos deleita con sus ideas es Quentin Dupieux, anunciado también en Sitges2019 (el año pasado ya presentó Au poste!) y que ahora vuelve con el que se dice es su film más redondo, Le daim (Íd., 2019). Esperemos no lo sea por ser más convencional.
Le daim
Faltan varias semanas y grandes esperadas que quieren verse en Sitges2019, y quizá una de las que se acaben confirmando sea, por ejemplo, Doctor Sueño (Doctor Sleep, Mike Flanagan, 2019), secuela de El resplandor (The Shinning, Stanley Kubrick, 1980). Veremos si acaba por confirmarse. Mientras tanto, toda la información de avances y venta entradas, en la web oficial del festival.