#Americana2020N4 (y adaptación)

#Americana2020N4: adaptación al medio

 

Sorry to Bother You (Íd., Boots Riley, USA, 2018, Tops)
Swallow (Íd., Carlo Mirabella-Davis, USA, 2019, Next)

 

Decía el escritor Jiddu Krishnamurti que no es saludable estar adaptado a una sociedad profundamente enferma. Dicha frase tiene la infrecuente propiedad de volverse más y más vigente a medida que pasan los años. Vivimos en una sociedad agresiva, exigente y excluyente con todos aquellos que no cumplen con los requisitos exigidos. Una sociedad que clasifica y discrimina a gran parte de sus habitantes por los más diversos motivos: migrantes, mujeres, homosexuales, transexuales, racializados, refugiados, personas con bajo poder adquisitivo, personas sin hogar, personas con diversidad funcional, personas que se atreven a cuestionar el sistema… Sistemáticamente, a millones de personas se les recuerda cada día de modo insistente que no encajan en la sociedad porque no cumplen los requisitos necesarios. ¿Y cuáles son los requisitos necesarios? ¿Cuántas personas hay en el mundo que puedan cumplirlos? Varias películas del Americana Film Fest han reflexionado sobre esta (im)posibilidad de encajar en la sociedad, pero en este artículo me gustaría destacar dos de ellas.

 

Sorry to Bother You

 

Con Sorry to Bother You (Íd., 2018), el rapero estadounidense Boots Riley debuta en la dirección y se atreve a hacerlo con una comedia surrealista, excesiva y sin complejos que realiza una corrosiva crítica tanto al racismo como al capitalismo neoliberal que impera en la sociedad estadounidense. Sorry to Bother You habla sobre precariedad económica, explotación laboral, abuso de poder e hiperproducción; pero a diferencia de Mano de obra (Íd., David Zonana, 2019), película mexicana también presente en el festival y de la que os hablamos en un texto anterior, se decanta por los caminos de la comedia alocada e incluso de la distopía bizarra de final inesperado. Sorprendente mezcla entre el activismo racial de Spike Lee y el surrealismo WTF de Quentin Dupieux, la historia narra las desventuras de Cassius “Cash” Green, joven afroamericano que vive en el garaje de su tío y trabaja como precario teleoperador para una gran empresa. En este nuevo empleo, las perspectivas de ascenso son pocas, pero el talento de Cash para fingir voz de blanco y cautivar a sus clientes permite que suceda el milagro. Mientras sus compañeros de trabajo protestan en masa por las malas condiciones laborales, Cash es ascendido y descubre cuán tentador puede llegar a ser el poder. La alegría, eso sí, durará poco. Porque cuando Cash descubra que la empresa oculta un oscuro, oscurísimo secreto, tendrá que replantearse su vida y sus principios.

 

Swallow

 

Y si la vida de Cash Green está marcada por la discriminación y la precariedad laboral, la de la protagonista de Swallow (Íd., Carlo Mirabella-Davis, 2019) se caracteriza por todo lo contrario. Recién casada con un hombre de buena familia, Hunter está destinada a ser el ama de casa perfecta que lo tiene todo. Todo… excepto interés por la vida. Porque Hunter es bonita, sí, pero a nadie parece importarle algo más aparte de esa hermosa fachada. Su inexpresivo y bello rostro de porcelana acepta con resignación que nadie la escuche ni la tome en cuenta: ni su marido, ni sus suegros… nadie. De hecho, ni siquiera está del todo segura de tener algo que decir, tal vez no. Tal vez solo sirva para ser una sufrida y perfecta ama de casa y, como mucho, tener descendencia bajo la indiferencia de su marido y los constantes consejos de su controladora suegra. Poco a poco, el sueño americano que Hunter inicialmente perseguía se va convirtiendo en pesadilla y las paredes de la luminosa casa de diseño se transforman en las paredes de una cárcel. Hunter pasa las horas muertas (que son muchas) decorando la casa, pero el vacío y la depresión se van apoderando de ella y tan solo una peligrosa adicción logrará motivarla de nuevo.

 

La opera prima de Carlo Mirabella-Davis, ganadora del premio a la mejor actriz en el Festival de Tribeca, de un Premio Especial en el Festival de Deauville y del Premio del Jurado Joven en este mismo festival, destaca sobre todo por la creación de una inquietante atmósfera y una cuidada fotografía, así como por la interpretación de su protagonista, Haley Bennett, si bien la resolución final de la historia no está a la altura de las expectativas creadas por una primera hora de impecable desarrollo. Con todo, probablemente esta opera prima despertará bastante expectación ante la futura (y esperemos prolífica) carrera de su director.

 

TRAILER – Sorry to Bother You (Íd., Boots Riley, 2018):

 

TRAILER – Swallow (Íd., Carlo Mirabella-Davis, 2019):

 

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Artista visual, escritora y crítica cinematográfica. Coeditora de la revista de crítica y análisis cinematográfico Contrapicado. Ha colaborado en publicaciones como Caimán Cuadernos de Cine, Sofilm, A* Desk, Cortosfera, Miradas de Cine, Sala 1 o Pliego Suelto, entre otras. Ganadora de la beca de videoarte de la Fundación BBVA, la beca Fundación Guasch Coranty o la beca Bòlit Mentor entre otras. Premio Embarrat IEI 2018 y premio a la mejor artista ART NOU 2012. Exposiciones individuales: Apuntes para una fuga (Centre del Carme, Valencia, 2018), Posibilidad y Palabra (Twin Gallery, Madrid, 2017), Anotaciones para una eiségesis (Twin Gallery, Madrid, 2015 y Centro de Arte de Alcobendas 2016), Obras (in)completas (Sala Muncunill, Terrassa, 2014), Acotaciones tras la cuarta pared (La Capella, Barcelona, 2013) e Intento frustrado de enumeración y explicación de todos aquellos elementos que resultan superfluos en la construcción de una catedral (Capella de Sant Roc, Valls, 2013). En 2012 publicó Mecánica de la desidia, su primera novela de ficción.

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